En este artículo hablaremos sobre los perros para cacería, sus características físicas, aptitudes, recomendaciones en cuanto al entrenamiento y aprendizaje del animal, momentos recomendables para sacar al animal a cazar para optimizar aún más su entrenamiento.
Diferencias entre distintas razas de perros de cacería radican en el trabajo que se realiza con el animal y cómo se ejecuta según las respectivas características. No es lo mismo un perro de determinada raza que utilicemos para cazar tórtolas que el tipo de perro en cuanto a sus características físicas como son los perros para la caza del jabalí.
Algunos sostienen que si el perro tiene buenas aptitudes físicas (fortaleza), a partir de los seis meses estaría apto para soportar una jornada de caza completa. De todas formas la edad óptima para su mejor aprendizaje es entre los ocho meses y el primer año.
Al comienzo, durante las primeras jornadas de caza, se debe dejar actuar al perro de forma natural, sin estarle demasiado encima y sin darle constantes órdenes.
Ejercicios:
Traer: Es de los primeros ejercicios que se le enseñan a los futuros perros de caza, usted deberá lanzar un objeto y enseñarle a que lo traiga. Aquí entra en juego el interés del animal por el elemento en cuestión, sea cariñoso, compañero y paciente durante los primeros tiros. Al volver al perro con el objeto no es conveniente retirárselo de inmediato, sino más bien acariciarlo y demostrarle que lo hizo de forma correcta, así él nos lo entregará, a diferencia de arrebatar el objeto contra su voluntad, esto hará que el perro ofrezca mayor resistencia.
Una vez que el perro aprendió este ejercicio deberemos comenzar a repetirle la palabra “muerto” u otra similar, de forma tal que relacione este vocablo con el hallazgo de la pieza.
Cobrar: Es uno de los ejercicios de mayor dificultad, este consiste en que el perro tome la pieza con la boca y la traiga de inmediato hacia nosotros.
Se debe tener en cuenta que tras el disparo debemos permanecer quietos en nuestro puesto, para que sea el perro quien se traslade a localizar la pieza. Para que este ejercicio resulte el perro debe estar correctamente adiestrado para traer, de forma tal que al oír la palabra “muerto” o la que hayamos utilizado al enseñarle, salga a buscar la presa de inmediato.
Recuerde que debe ser paciente con el perro y darle todo el tiempo que necesite para aprender las órdenes, así también darle ánimo y premiarlo por cada objetivo concretado, esto hará que se motive aún más y no desista. También le recomendamos que intercambie experiencias con otros cazadores que posean perros de la misma raza y asista a eventos como ferias de perros de caza, dónde recibirá información útil para desempeñar esta tarea. |